No comprendo por qué mi voz no es suficiente
por qué parezco mudo
por qué mis gritos no se oyen
en el silencio de la ciudad.
Por qué lo que siente mi corazón
lo que alumbra mi alma
no ilumina mis versos
se pierde antes de nacer
se agota como agua en el desierto
sin calmar ninguna sed.
Por qué amando, sintiendo, deseando
parezco incapaz
inútil
muerto.
Señor.. Gaviero hoy te as superado.
ResponderEliminarPues muchas gracias por el comentario; me alegro que le haya gustado, sea quien sea.
ResponderEliminarGracias por leer lo que por aquí dejo, mal que bien. Es grato comprobar que de vez en cuanto alguien lee mis pequeñas ocurrencias. Gracias y cuídese